A dos meses de ser atropelladas por funcionaria federal, madre e hija esperan reparación del daño
Redacción/Vale por México
2018-03-10 12:59:39
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El pasado 17 de diciembre una joven madre de 29 años de edad y su hija de 5 años fueron brutalmente arrolladas por un vehículo que era conducido por una funcionaria federal por calles de la delegación Coyoacán en la Ciudad de México.


Se trata de Janet Mejorada y su hija Natalia Mancilla Mejorada, quienes fueron arrolladas por Patricia López Sánchez, asesora de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano (SEDATU), que conducía a exceso de velocidad y tras golpearlas las arrolló una segunda vez cuando intentaba escapar.

En su intento de fuga, la funcionaria de la SEDATU destrozó las piernas de la niña y le provocó una fractura expuesta a la madre en la pierna izquierda. Pese a que desde entonces las dos víctimas han sido intervenidas quirúrgicamente en ocho ocasiones, no hay certeza ni de que Janet vuelva a usar su pierna con normalidad y, en el caso de su hija, de que siquiera vuelva a caminar.

Hoy, a más de dos meses de aquel hecho, ni Janet Mejorada Sánchez ni su hija Natalia Mancilla Mejorada han podido ser dadas de alta de la clínica de traumatología del IMSS en un intento de salvarles la vida y de rehacerles los huesos que quedaron hechos añicos.

Luego de casi tres meses del trágico accidente, las víctimas no han recibido ningún tipo de apoyo de las autoridades, pues hasta el momento la única acción tomada por la SEDATU fue la de separar oficialmente a Patricia López de su cargo, aunque las víctimas aseguran que aún colabora de forma externa con la dependencia.

La dependencia sólo se deslindó públicamente del caso separando a la asesora pero nunca se comunicó con la familia de las víctimas para apoyarla de alguna manera, algo que tampoco hizo la propia responsable del atropellamiento.

Y es que en términos económicos, hasta el momento se estima que las víctimas han gastado más de 4 millones de pesos, entre gastos médicos y de cuidados, pues incluso el padre de la pequeña Natalia, Julio César Mancillas, manifestó que debió dejar su trabajo para atender a las dos lesionadas.

Según lo informado por el medio digital Animal político, Mancillas ha manifestado que desde el principio de la investigación del caso, ésta ha estado plagada de irregularidades, muestra de ello es que Patricia López fue liberada casi de manera inmediata tras los hechos, a petición de la SEDATU.

También llama la atención que incluso sus abogados apelaron la decisión de un juez que vinculó a proceso a la funcionaria, con el argumento de que el padre de la niña que denunció los hechos no está casado oficialmente con la madre de Natalia y, por tanto, no se comprueba su nexo sanguíneo como lo exige la ley, a lo que el hombre respondió que lleva 10 años viviendo en unión libre con Janet y que ella y Natalia son derechohabientes del IMSS por ser su pareja e hija.
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